La Catedral Nacional de Washington, uno de los templos religiosos más importantes de los Estados Unidos, celebrará ceremonias de matrimonio entre personas del mismo sexo, de acuerdo al rito establecido por la iglesia episcopaliana (la rama estadounidense de la confesión anglicana) para bendecir dichas uniones.
La noticia la ha anunciado el deán de la Catedral Nacional (un imponente templo neogótico vinculado a la iglesia episcopaliana) a través de un emotivo comunicado en el que expresa su profunda satisfacción por acoger estas ceremonias. “Afirmamos de forma entusiasta que cada persona es un hijo amado de Dios, y ello significa incluir la plena participación de gays y lesbianas en la vida del hogar espiritual de la nación”, afirma el reverendo Gary Hall. “En mis 35 años en la clerecía, algunas de las obras de trabajo que personalmente más me han inspirado han nacido de las comunidades gais y lesbianas con las que he trabajado”, añadió. Aseguran además, que “significa algo más el que digamos ‘lo vamos a hacer en este espacio tan visible donde oramos por los presidentes y tenemos los funerales de nuestros dirigentes’. Este espacio espiritual nacional es ahora un sitio donde las personas homosexuales, bisexuales y transexuales pueden venir y casarse”, han comentado con orgullo a los medios.
La Catedral Nacional, también llamada San Pedro y San Pablo, es la sede de la Iglesia Episcopal de EEUU, y desde hace años esta Iglesia a defendido la inclusión de los homosexuales en la sociedad, por tanto se acoge a la nueva ley y se muestran contentos de poder celebrar matrimonios entre personas del mismo sexo. La Catedral Nacional de Washington es conocida, en efecto, como la “casa nacional de oración”, y es un simbolo religioso de primer orden en Estados Unidos. En ella se han celebrado por ejemplo los funerales de estado de varios presidentes norteramericanos, como Dwight Eisenhower, Ronald Reagan o Gerald Ford, o se realizán eventos especiales como el del próximo día 22 de enero, donde se realizará una oración con motivo de la investidura de Barack Obama.
La catedral comenzó a construirse en 1907 y no se acabó hasta 1990, cuando George H. W. Bush tomó parte en el acto de colocación del último pináculo. Con sus 92 metros, es la cuarta estructura más alta de Washington, una ciudad donde están prohibidos los rascacielos. En su interior han tenido lugar grandes encuentros políticos y religiosos, como el último sermón que el reverendo Martin Luther King pronunció en 1968, antes de ser asesinado. En 2011 el edificio quedó dañado por un terremoto, que provocó grietas y la rotura de varios elementos decorativos en el exterior.
La iglesia episcopaliana, rama estadounidense de la comunión anglicana, es sin duda una de las más inclusivas de entre las grandes confesiones religiosas. ya en 2003 hacía historia ordenando obispo a Gene Robinson, abiertamente gay. Y en 2009 rompía con la moratoria autimpuesta varios años antes y decidía volver a ordenar obispos y obispas abiertamente homosexuales, así como bendecir a las parejas del mismo sexo. Más recientemente, en verano de 2012, aprobaba la ordenación de personas transexuales, así como la creación de un rito litúrgico de bendición de las parejas del mismo sexo (aunque los sacerdotes episcopalianos podían desde 2009 bendecir este tipo de uniones, no existía una liturgia definida y cada uno lo hacía a su modo).
Un rito que en este caso podrá aplicarse a parejas que efectivamente contraigan matrimonio con plena validez civil, ya que Washington D.C., la capital federal, aprobó el matrimonio entre personas del mismo sexo hace ya tres años. Pero en la decisión ha tenido mucho que ver, como el propio comunicado del deán de la catedral reconoce, la más reciente aprobación en referéndum del matrimonio igualitario en el vecino Maryland: la diócesis episcopaliana de Washington cubre no solo a Washington D.C, sino a cuatro condados de Maryland. El hecho de que este estado disponga también de matrimonio igualitario ha despejado el camino para que la obispa de Washington, Mariann Edgar Budde, autorice la celebración de estas bodas en templos de su diócesis.
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